La apasionante historia de la emprendedora que creó La Moyera, el turrón más querido de las islas
La fábrica se colocó en lo que inicialmente era la vía Mateos de Matos Quintana. En 1902 los turrones tenían forma de tableta, como los de Alicante, y con almendra canaria.
Pero es en 1916 cuando se crea formalente la marca La Moyera. Un siglo después, la empresa sigue funcionando con el mismo formato con el que Juana Rodríguez empezó venderlos. Y es que la repostería en Moya es tremenda. Además de turrones, tienen productos como los bizcochos y suspiros de Moya con la marca Doramas.
Ya ha superado sus primer centenario. Es una marca característica de Las Islas, La Moyera. Son 101 años ya de venta de este producto de la repostería artesanal que tiene su germen en el norte de Gran Canaria, en Moya.
Su característica es que están hechos con una masa de azúcar, agua y claras batidas a punto de nieve, en un gran caldero en el que se añaden los ingredientes que le dan su característica textura y sabor. Matalahúva almendras tostadas, aroma tártaro, limón rallado, canela, y pan bizcochado rallado.
La masa se pone sobre una galleta dentro de unos aros de papel que le sirven de molde y se tapa con otra galleta. De aquí salen el turrón de almendras, el molido, azúcar y el de gofio.
Ya se pueden comprar en centros comerciales, pero también sigue su modelo de comercialización tradicional con una caja del turrón metálica con colores amarillo, sombrilla. En todos los pueblos de Gran Canaria siempre está presente.